Card #16: ¿Qué te MOVE?

… somos movidos también por una cultura no especista.

¿Has notado cuánto de tu conducta es especista?

Hum, está bien, pero ¿sabes qué es el especismo?

En el mundo en que vivimos hay mucha discriminación, de muchos tipos diferentes. La discriminación ocurre cuando alguien recibe una menor consideración moral que otro, o es tratado peor que otro por una razón injustificada. Hay discriminación contra ciertos seres humanos en función de su sexo, color de piel, orientación sexual y por muchas otras razones. [1]

Desde esa perspectiva, el especismo es la discriminación practicada por la especie humana contra las otras especies, similar al racismo, el sexismo y otros. “El patrón es idéntico en todos los casos”. [2]

Por lo tanto, si les brindamos consideración moral a los demás, significa que tenemos en cuenta la forma en que se verán afectados por nuestras acciones y omisiones, actitudes y decisiones [1]. Por otro lado, si no tenemos en cuenta el daño a los animales y a los ecosistemas, significa que no le damos consideración moral. De esta manera, actuamos de una manera especista, ya que nos centramos en sí mismos y, en consecuencia, no nos preocupa la vida de los demás. Es una actitud egoísta.

Y es precisamente del egoísmo, de acuerdo con El Libro de los Espíritus, que “de él arrancan todos los males”. Porque “éste es incompatible con la justicia con el amor y con la caridad; neutraliza todas las otras cualidades”. [3]

Tal discriminación ético/moral contra todo lo que no es humano llevó a la humanidad a convertirse en consumidor voraz de la Tierra, ocasionando una crisis ambiental (y moral) sin precedentes. Para hacerlo efectivo se han inventado una serie de conceptos antropocéntricos y especistas que ya han sido derrumbados en la modernidad, a pesar de que aún no en el corazón humano. Por ejemplo, que los animales son irracionales, que no tienen lenguaje, no tienen inteligencia, no sufren, no sienten, no socializan, no les preocupa sus vidas, no tienen alma, no evolucionan, etc…

Por otro lado, la Doctrina Espírita contribuyó sobremanera al gradual rompimiento con el especismo, para que, superándose a sí mismo, comencemos a actuar de una manera no especista, es decir, de una manera cristiano-espírita, basada en la “Ley de Justicia, Amor y Caridad” con todas las especies y ecosistemas, y no solo la humana, en aquello que llamamos ética animal espírita.

Veamos algunas de las cientos de aportaciones de la Literatura Espírita, desde su codificación hasta la actualidad:

  • Los animales son almas en evolución, con el objetivo de convertirse en espíritus humanos (Preguntas 597; 597-a y 607-a) [4];
  • El hombre tiene el deber sagrado de proteger y educar a los animales [5, 6 y 7];
  • No hemos respetado estos lazos afectivos entre los animales cuando los separamos de sus familias y de sus amigos para que sean comercializados en las industrias de la carne, la leche, los huevos [6 y 7];
  • La matanza de animales a una edad temprana, si bien podrían vivir durante décadas, conduce a un exceso de fluido vital y, según André Luiz, los fluidos son absorbidos por los hermanos desencarnados que están desequilibrados y aún dependen de las sensaciones de la materia (vampirismo). Esta necesidad de fluido vital los induce a permanecer en las sombras, porque para obtener las energías, necesitan prestar servicios a los espíritus desencarnados que encabezan los mataderos, un entorno que, según André Luiz, es lo peor que él haya visto [7];
  • Según Emmanuel, “la ingestión de las vísceras de los animales es un error de enormes consecuencias, del cual derivan numerosos vicios de la nutrición humana”.
  • Según Humberto de Campos, “El cementerio en la barriga es un tormento, después de la gran transición. El lomo de cerdo o el filete de ternera, sazonados con sal y pimienta, no nos ponen muy lejos de nuestros antepasados, los tamoios y los kayaks, que se devoraban unos a los otros.” [9]
  • Según André Luiz, es necesario “Abstenerse de perseguir o apresar, maltratar o sacrificar animales (…) por medio de excursiones periódicas a los campos, lagos y ríos, o en competiciones deportivas sangrientas, persiguiendo con ello un placer recreativo. (…)  En el socorro a los animales enfermos, usar los recursos terapéuticos necesarios, sin olvidar incluso aquellos de naturaleza mediúmnica que aplique en su propio bien.” [10]
  • Según Emmanuel, debemos aprender la Ley de Dios en las páginas vivas de la Naturaleza, que esperan nuestra piedad “por los árboles despojados, por las fuentes contaminadas, por las aves sin nido o por los animales desamparados y enfermos”.
  • Finalmente, según Juana de Angelis, debemos “amar(r) por el camino tanto cuanto puedas, plantas, animales, hombres, y te descubrirás superiormente amando a Dios”.[12]

Existen innumerables recomendaciones y advertencias no especistas de los benefactores espirituales, anticipando a los debates modernos que exigen una consideración ética y moral por los animales y los ecosistemas.

El Espiritismo refleja el llamado de Jesús para una buena lucha contra el especismo y el antropocentrismo, que todavía están en nuestro bagaje espiritual, en nuestra vida diaria, en nuestra conducta y cultura, que necesitan urgentemente de resignificación.

Es posible. No es tan difícil. Y podemos ayudarte.

Por lo tanto, en tu hogar, en tu trabajo, en tu vida social y en tu casa espírita, donde puedas, muévete también por los animales y por toda la naturaleza, y no solo por los humanos.

Referencias:

[1] https://www.animal-ethics.org/etica-animales-seccion/especismo/

[2] SINGER, Peter. Libertação Animal. [Liberación animal.] Porto Alegre: Lugano, 2004.

[3] KARDEC, A. El libro de los Espíritus. Trad.: José María Fernández Colavida. Ed. digital, FEE, set. 2018. Pregunta 913. Acceso el 26-06-2020 https://url2.cl/9g7wk

[4] KARDEC, A. El libro de los Espíritus. Trad.: José María Fernández Colavida. Ed. digital, FEE, set. 2018. Capítulo XI. Acceso el 26-06-2020 https://url2.cl/9g7wk

[5] XAVIER, F. C.; EMMANUEL (Espíritu). Emmanuel. Versión digital. Trad. R. Bertolinni. 108 p. Cap. XVII. Acceso el 28-06-2020 https://bit.ly/2YH09hC

[6] XAVIER, F. C.; ANDRÉ LUIZ (Espíritu). Los mensajeros. Versión digital. Trad. Alipio González Hernández. 288 p. Cap. 42. p 235-240. Acceso el 15-06-2020 https://bit.ly/2YFogMa

[7] XAVIER, F. C.; ANDRÉ LUIZ (Espíritu). Misioneros de la Luz. 1ª ed., 2007. Derechos de autor cedidos gratuitamente por la Federación Espírita Brasileña. 352 p. Cap. 4 y 11. Acceso el 14-03-2020 https://rb.gy/axviv9

[8] XAVIER, F. C.; EMMANUEL (Espíritu). El Consolador. Trad. Henry Chara. Edición digital. 122 p. Questión 129. Acceso el 15-06-2020 https://bit.ly/2Y2U5j1

[9] XAVIER, F. C.; IRMÃO X (Espírito). Cartas e Crônicas. [Cartas y Crónicas.] 14 ed. 3 imp. Brasília: FEB, 2015. 167 p. Capítulo 4 “Treino para a morte”, [Entrenamiento para la muerte] pp. 18. 

[10] VIEIRA, W. ANDRÉ LUIZ (Espíritu). Conducta espírita. Versión digital. Federación Espírita Española. 70 p. Capítulo 33 “Frente a los Animales”, p 50. Acceso el 15-06-2020 https://bit.ly/37vPEQZ

[11] XAVIER, F. C.; EMMANUEL (Espírito). Alma e luz. [Alma y Luz.] Capítulo “O maior mandamento”. [El mayor mandamiento].

[12] FRANCO, D. P.; JOANNA DE ÂNGELIS (Espírito). Leis Morais da Vida. [Leyes Morales de la Vida.] 15 ed. Salvador: LEAL, 2014. 224 p. 2ª parte, cap. 1 “Amar a Deus”, [Amar a Dios] pp. 18.

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